El directivo del conjunto italiano Gianni Di Marzio quiso fichar a Cristiano Ronaldo en 2002. La operación se detuvo ya que Marcelo Salas rechazó un intercambio por el portugués con el que terminaría jugando en el Sporting de Lisboa.

"Él llevaba el número dieciocho cuando yo trabajaba en la Juventus"(...) "Llamé a Turín y señalé que sería el mejor jugador del mundo, obviamente después de Maradona. Negocié, llevé a Cristiano a Turín en 2002 para firmar con el Juventus pero Salas no aceptó el trueque".

"La Juventus perdió a Cristiano Ronaldo", zanjó, después de asegurar que su agente, Jorge Mendes, "conoce muy bien esta historia" Di Marzio, que entrenó al Nápoles en la década de los 70, afirmó que "por pocos millones Salas no quiso ir y luego terminó en el River Plate".

"Maradona transmite energía al equipo, incluso desde la grada. Es una figura que sienten todos lo que juegan en el Nápoles. Fue capaz de reunir a 80.000 personas en San Paolo sin jugar un partido. Sólo por el simple hecho de dar dos toques al balón. Es una divinidad del fútbol, con respeto para Messi y todos los demás".

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