14.03.2017 09:27 h

Árbitros mexicanos ponen fin a la huelga

Los árbitros de México, que protagonizaron un inédito paro que obligó a suspender el fútbol el fin de semana pasado, volverán a las canchas luego de que el argentino Enrique Triverio y el paraguayo Pablo Aguilar recibieran penas agravadas por agresión a dos silbantes.

Se ha "determinado sancionar a los jugadores Enrique Triverio del Club Toluca y Pablo Aguilar del Club América con un año de suspensión", informó en un comunicado la Federación Mexicana de Fútbol. La Asociación Mexicana de Árbitros (AMA) reaccionó poco después: "Nos incorporamos a los trabajos en la cancha dando nuestro mejor esfuerzo".

La AMA realizó la huelga en protesta por las sanciones iniciales de unos pocos partidos contra los sudamericanos, que habían sido aplicadas por la Federación de Fútbol. Los hombres de negro volverán a silbar el martes en los cuartos de final de la Copa México, que se juega en paralelo al torneo, que deberán prolongarse hasta el miércoles.

Los árbitros reclamaban una suspensión de un año como marca el reglamento y presentaron un recurso ante la Comisión de Apelaciones de la Federación, que resolvió este lunes modificar la sanción. Los árbitros aplaudieron esta decisión que, afirmaron en un comunicado, "ha sentado un precedente para que sea el orden y el respeto lo que impere en el terreno de juego".

Las acciones de la polémica

Las polémicas agresiones se generaron en partidos de la Copa México el miércoles pasado: Triverio empujó al árbitro Miguel Angel Flores en el partido en que Toluca cayó 3-2 ante el Morelia y Aguilar le dio un cabezazo al juez Fernando Hernández en el partido en el que el América perdió 1-0 ante el Tijuana.

La tarde del viernes, poco antes de que arrancara la jornada 10 del Torneo Clausura 2017, la Federación consideró que estas agresiones no se habían consumado y les aplicó sanciones de 10 partidos para Aguilar y de ocho para Triverio. Esto provocó el enojo de los silbantes, cuya protesta obligó a cancelar toda la jornada, lo que dejó pérdidas por unos 2,8 millones de dólares para los clubes, según estimaciones de la prensa deportiva mexicana.

afp/livefutbol