Juventus de Turín-Milan, un gran clásico pese a la distancia que separa en la actualidad a ambos equipos, será el partido más atractivo de la 22ª jornada del Campeonato de Italia, el sábado. Filippo Inzaghi, aún en período de aprendizaje en el banquillo del Milan, se encuentra con el profesor Massimiliano Allegri, su último entrenador, con el que los lazos no eran idílicos.

El técnico no hacía jugar mucho a Pippo y cuando el exdelantero pasó a ser entrenador, con los jóvenes "Rossoneri", Inzaghi esperaba haber sido elegido para hacerse con el puesto de Allegri. Pero fue Clarence Seedorf el elegido para sustituir al técnico toscano, aunque no duró mucho tiempo. El fracaso del holandés precipitó la llegada de Inzaghi al banquillo, pero desde entonces el legendario goleador no acaba de triunfar.

Todo aleja a ambos equipos, comenzando por la diferencia de 21 puntos en la clasificación, liderada por la Juve. La victoria del Milan (8º) contra Parma (3-1) mitigó las cosas, tras cuatro derrotas en cinco partidos. La defensa de Pippo no está bien y su ataque depende del francés Jérémy Ménez (12 goles), jugador intermitente. En plena forma, la Juve querrá aprovechar la crisis de la Roma para decidir el campeonato.

Roma y Nápoles

El conjunto turinés tiene siete puntos de ventaja sobre el cuadro capitalino y puede relegar a su rival a diez puntos antes del Roma-Cagliari, el domingo. Tras cuatro empates consecutivos en Serie A, el AS Roma debe vigilar el buen momento del Nápoles, a cuatro puntos, más que en soñar con atrapar a la Juve. Asegurar la segunda plaza, y la calificación directa a la Liga de Campeones, parece un objetivo más razonable por ahora.

Con muchos lesionados, como Castan, Kevin Strootman o Daniele De Rossi, además de los marfileños Gervinho y el recién fichado Seydou Doumbia, que jugarán el mismo día la final de la Copa de África, la Roma puede caer en Cerdeña. Nápoles (3º) parece salir de las turbulencias de la primera mitad de temporada y recibe al Udinese con la Roma en el punto de mira. Todo sonríe ahora al equipo de Rafael Benítez, vencedor en el último segundo del Inter de Milán (1-0) en Copa de Italia, el miércoles, con un gol del argentino Gonzalo Higuaín.

El goleador argentino es el símbolo de la reconquista. Tras un inicio fallido, tras la decepción de su final de Copa del Mundo perdida, lleva ahora 18 goles entre todas las competiciones.

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afp/livefutbol