26.05.2016 17:35 h

Los argentinos del Atleti quieren 'vendetta' del '74

Augusto Fernández en un duelo frente al PSV de la presente Champions. (Foto: Imago)
Augusto Fernández en un duelo frente al PSV de la presente Champions. (Foto: Imago)

El Atlético de Madrid y sus jugadores argentinos, con Diego Simeone como director de orquesta desde el banquillo, tiene la oportunidad de cobrarse la 'vendetta' el sábado en la final de Milán de otros argentinos que estaban en el plantel de la primera Copa de Europa perdida en 1974.

Aquella final de hace 42 años fue con un argentino, Juan Carlos 'Toto' Lorenzo, como entrenador. Y otro argentino, el defensa Ramón 'Cacho' Heredia, estaba sobre el campo con la difícil misión de frenar a Gerd Müller, Uli Hoeness y el resto de figuras del Bayern de Múnich. 

Rubén 'Ratón' Ayala y Rubén 'Panadero' Díaz, otros argentinos de aquel Atlético, no pudieron estar en la final de Bruselas al estar sancionados, pero formaban parte también de aquel equipo que estuvo a un paso de proclamarse campeón de Europa tras adelantarse con un gol de Luis Aragonés, pero un tanto de los alemanes en el último minuto de la prórroga forzó un partido de desempate en el mismo estadio de Heysel, donde los bávaros arrollaron 4-0.

Tampoco jugó en Bruselas el otro argentino de aquel partido, Iselín Santos Ovejero, lesionado y que después de aquella temporada abandonó el club con destino a Zaragoza. Cuatro jugadores argentinos forman parte también del plantel de esta temporada del Atlético y pueden por ello ser campeones de Europa el sábado en Milán: Augusto Fernández, Matías Kranevitter, Luciano Vietto y Ángel Correa. De ellos, sólo el mediocampista Augusto Fernández jugó las semifinales contra el Bayern este curso, siendo titular en ambos partidos.

En el cuerpo técnico, Argentina tiene también un peso clave en este Atlético, con Diego Simeone como entrenador principal y alma del equipo, y German 'Mono' Burgos como ayudante. En 2014, el Atlético había jugado su segunda final del máximo torneo europeo y perdió 4-1 en la prórroga. Diego Simeone estaba también en el banquillo y un argentino jugó en aquel partido en Lisboa, José Sosa, que entró en el partido durante la segunda parte.

Argentina y el Atlético de Madrid han tenido tradicionalmente lazos estrechos. A principios de los años setenta, en el fútbol español se autorizó la presencia de dos jugadores extranjeros más allá de los inicialmente permitidos, los 'oriundos' (jugadores extranjeros, básicamente latinoamericanos, con orígenes españoles), que habían dado lugar a fraudes en años anteriores.

Los grandes de España tomaron decisiones. El Real Madrid se orientó más hacia el fútbol alemán (Günter Netzer, Paul Breitner) y el Barcelona empezó su tradición holandesa, con Marinus Michels como entrenador primero y luego la llegada de Johan Cruyff y Johan Neeskens. En el caso del Atlético, Argentina fue el vivero preferido y en aquel plantel de la 1973-1974 eran cuatro jugadores, entre cupo de extranjeros y 'oriundos', y el entrenador.

"¡Cuidado con los argentinos del Atlético!", llegó a titular la prensa escocesa antes de un duelo de las semifinales de aquella Copa de Europa ante el Celtic, que terminó con tres expulsados en los españoles, dos de ellos argentinos ('Panadero' Díaz y 'Ratón' Ayala), en un partido muy violento bautizado desde entonces como la "batalla de Glasgow".

El empate 0-0 en esa ida en Escocia se completó con el triunfo 2-0 de la vuelta en Madrid. Y el Atlético llegó a aquella primera final que desde hace 42 años sigue como un trauma histórico para el equipo 'colchonero'. El sábado puede saldar esa vieja cuenta pendiente.

afp/livefutbol