El jugador del Club América Oribe Peralta admitió este sábado que el equipo mexicano afronta el Mundial de Clubes de Japón con "sed de revancha" tras la decepción que supuso el quinto puesto en el torneo de hace un año.

"Estamos que ser de revancha porque el año pasado no ofrecimos el verdadero nivel del fútbol mexicano", explicó el delantero. En la edición de 2015, América perdió en su debut ante el Guangzhou Evergrande chino, quedando fuera de las semifinales de un torneo que acabó en quinta posición tras ganar al Mazembe africano.

"Sabemos lo que representa y lo que nos costó estar acá y el año pasado lo dejamos ir por situaciones que no pudimos manejar, ahora sabemos lo que tenemos que hacer para conseguir el pase a la siguiente ronda", añadió Peralta, que el domingo ante el Jeonbuk surcoreano, campeón asiático, sera casi seguro capitán por la lesión de Rubens Sambueza.

Sobre su papel como capitán, el internacional destacó que "voy a aportar lo que siempre he aportado: mi entrega, los deseos de ganar y siempre con el máximo esfuerzo por cada uno de mis compañeros para lograr el objetivo que perseguimos".

Sobre su rival, Peralta explicó que ya se ha enfrentado en varias ocasiones a la selección de Corea del Sur y que los surcoreanos son "jugadores rápidos, muy ordenados, que nunca se dan por vencidos y eso hace que te compliquen los partidos".

Por último, el jugador fue preguntado por una anécdota que vivió el viernes, cuando un joven aficionado se acercó al hotel de los mexicanos a conocer a su ídolo: "Es uno de los momentos más gratificantes que me ha dejado el fútbol, no pensé que fuese a estar tan emocionado. Creí que solo quería un autógrafo, pero el hecho de que haya aprendido algunas palabras en español para decírmelas me emocionó muchísimo".

afp/livefutbol