26.01.2017 10:52 h

Homenaje a Chapecoense: Brasil 1-0 Colombia

El encuentro se lo llevo Brasil gracias al tanto de Dudu. (Foto: Getty)
El encuentro se lo llevo Brasil gracias al tanto de Dudu. (Foto: Getty)

Menos de dos meses después del accidente de avión que diezmó al Chapecoense, el público de Rio de Janeiro le rindió este miércoles un emotivo homenaje en una ceremonia antes del amistoso entre las selecciones de fútbol de Brasil y Colombia.

Brasil venció 1-0 a Colombia en el llamado "Juego de la amistad", celebrado en el Estadio Olímpico Nilton Santos, conocido como Engenhao. Aunque el público fue menos que el esperado -debido a los altos precios de los ingresos y a la crisis financiera que azota al Estado de Rio de Janeiro- los 18.695 cariocas en la tribuna vibraron durante el homenaje antes del puntapié inicial.

Después de entonar el grito de guerra "Vamos, vamos Chape", los hinchas recibieron con aplausos a los cuatro sobrevivientes brasileños de la tragedia que hizo al modesto Chapecoense mundialmente conocido. El arquero Jackson Follman, que tuvo una pierna amputada y todavía se desplaza en silla de ruedas; el zaguero Neto, el lateral Alan Ruschel y el periodista Raphael Henzel.

En la mitad del campo, los sobrevivientes recibieron placas de homenaje de manos de dirigentes de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) y el saludo de los jugadores de la selección. "Estoy feliz de estar vivo y poder celebrar la vida", dijo Ruschel en una entrevista con la emisora oficial Sport Tv. "Mi recuperación está yendo bien. Los médicos dicen que en mayo ya podré volver al campo", añadió el lateral.

Los jugadores de la 'canarinha' entraron en campo portando cada uno un ramo de flores blancas, que entregaron a sus pares colombianos como agradecimiento simbólico por el cariño demostrado por Colombia después del accidente. Luego de los himnos el estadio estalló en "un minuto de palmas", y no de silencio, en homenaje a las víctimas. Enseguida se soltaron decenas de globos blancos en dirección al cielo.

Los 1,2 millones de reales recaudados en el partido (más de 378.000 dólares) serán donados al 'Chape', que entregará el valor a los familiares de las víctimas.

El 28 de noviembre, el Chapecoense viajaba a Medellín para disputar la final de la Copa Sudamericana contra el Atlético Nacional cuando su avión se estrelló en una zona montañosa próxima a la ciudad colombiana. De las 77 personas a bordo, 71 fallecieron, entre jugadores, miembros de la comisión técnica y dirigentes del club, además de periodistas y tripulantes.

Supervivientes a la tragedia

Además de los cuatro brasileños, sobrevivieron dos bolivianos, tripulantes de la aeronave. "El resultado es lo que menos interesa", afirmó Tite en una conferencia tras el encuentro amistoso. 

"Le dije a José Pekerman (técnico de Colombia) que me gustaría que no hubiese un vencedor hoy. La gratitud que siento se extiende al pueblo colombiano, al pueblo brasileño, al Chapecoense", añadió el técnico brasileño, que completó su séptima victoria consecutiva -en siete partidos- al frente de la selección.

De su lado, Pekerman lamentó las dificultades para la realización del partido, pero celebró la posibilidad de probar nuevos atletas.

"Tuvimos dificultades para estar aquí, con problemas de calendario y liberación de jugadores. Pero dentro del campo creo que el partido permitió mostrar que esos jugadores pueden ayudar y que pueden volver a ser convocados para la selección colombiana", afirmó.

Brasil abrió el marcador casi al comienzo del segundo tiempo. Dudu aprovechó un rebote del arquero David González y marcó el 1-0 que sellaría el resultado. Sin autorización de la FIFA para convocar a sus estrellas que juegan en Europa, los técnicos de ambas selecciones aprovecharon el partido benéfico para probar jugadores que actúan en Sudamérica. Tite convocó a 23 jugadores de los cuales apenas ocho tenían experiencia previa con la selección de Brasil.

Calidad sobre el verde

Los veteranos Diego (centrocampista, 31 años) y Robinho (delantero, 32) tuvieron la misión de guiar al grupo, que logró la victoria después de haber compartido juntos un solo entrenamiento. Colombia no logró imponerse pese a que Pekerman convocó a siete jugadores del Atlético Nacional, actual campeón de la Libertadores.

Un cabezazo de Mateus Uribe fue desviado milagrosamente por el palo izquierdo y el delantero Miguel Borja puso en peligro varias veces a los brasileños, pero ninguna situación del artillero del Atlético Nacional acabó en gol. El club de Medellín era el adversario del Chapecoense en la final de la Copa Sudamericana que nunca llegó a disputarse y emocionó al mundo, especialmente a Brasil, con sus homenajes a las víctimas y la renuncia al título de la competición continental en favor de un 'Chape' destruido.

afp/livefutbol