13.02.2018 13:22 h

El futuro de Unai Emery en el PSG pasa por Madrid

Unai Emery no quiere vivir otra experiencia como la del Camp Nou. (Foto: Getty)
Unai Emery no quiere vivir otra experiencia como la del Camp Nou. (Foto: Getty)

Considerado como un valor seguro en España, el técnico Unai Emery sigue estando cuestionado en Francia y ahora que se acerca el final de su contrato con el París SG, la eliminatoria contra el Real Madrid le ofrece la oportunidad de reivindicarse.

A sus 46 años, el técnico vasco se ha enfrentado en 20 ocasiones al Real Madrid, con el modesto Almería y después con Valencia y Sevilla. El balance no es muy positivo: 14 derrotas, cinco victorias y un empate. Y peor aún es el balance en sus visitas al Santiago Bernabéu, el templo blanco en el que el París SG disputará el miércoles la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones y donde Emery se jugará buena parte de su crédito: en 10 partidos, nueve derrotas y un empate.

Aunque Emery ha ganado tres Europa Leagues con el Sevilla (2014, 2015 y 2016), al técnico vasco no le faltas detractores. También tiene algún abogado defensor, como el internacional argelino Sofiane Feghouli, al que dirigió en el Valencia y que le calificó como "uno de los mejores entrenadores del mundo".

"Ya fuese en el Bernabéu o en casa, siempre metíamos mucha presión", recuerda el futbolista. "Tácticamente llegamos al punto de conocer todas las calidades y todas las debilidades del rival en cada partido". "La semana, en el entrenamiento, él te da la estrategia a seguir y las fases de juego a hacer, todo para que tú llegues preparado", añade el argelino, de 28 años, a la AFP.

En caso de derrota, "no puedes decir que sea su culpa. Te enseña que debes aprender del rival, llegas preparado a este tipo de partidos y después son los jugadores los que deben asumir y ganar los partidos". "Para el fútbol español, es un orgullo que este tipo sensato, infatigable y prudente ocupe un banquillo tan prestigioso", explicó Alfredo Relaño, director del diario deportivo AS en una editorial.

En cambio, su balance en París es más bien modesto y sobre todo está marcado por dos catástrofes en las ambiciones del PSG: la pérdida del título de la Ligue 1, a favor del Mónaco la temporada pasada, y la humillación en Barcelona, al encajar 6-1 en el Camp Nou en estas mismas alturas de la competición europea y ser incapaz de defender el 4-0 logrado en el Parque de los Príncipes.

El entrenador tuvo que gestionar la marcha de algunas piezas clave del PSG, como el sueco Zlatan Ibrahimovic o el brasileño David Luiz. Y su francés no le permite expresarse con el humor y el carisma a como lo hace en español. Estos puntos negativos han ocultado sus "méritos" al frente del PSG, como la victoria 4-0 al Barcelona en una lección de fútbol.

Florent Toniutti, autor del blog 'Crónicas tácticas', explica el "apogeo" de la identidad colectiva del PSG en versión Emery: "En París, ha inculcado los datos del juego de posición a un equipo que tiene mucha posesión", dice el experto, destacando "a los centrocampistas más adelantados en el terreno de juego, los laterales que ocupan toda la bandda y los extremos que se meten hacia el centro".

Individualidades de gran calibre

Esta temporada, la 'huella' de Emery es menos visible, según Toniutti. "Con los fichajes de Neymar y Mbappé, hay menos claridad a nivel colectivo, pero la calidad individual puede marcar diferencias en cualquier momento".

"El objetivo es casi llevarles el balón para que marquen diferencias con la pelota en los pies (...) y después encontrar el equilibrio defensivo que permita resistir en la Liga de Campeones". En suma, Emery es ahora menos indispensable, sobre todo con respecto a Neymar, que según algunos medios tampoco tiene una gran estima a su entrenador.

Otro problema para Emery es que el director deportivo del PSG, el portugués Antero Henrique, tampoco está totalmente convencido del trabajo del vasco. Y el contrato del español acaba el 30 de junio... salvo si el club francés alcanza las semifinales de la Liga de Campeones.

Preguntado en enero por sus ganas de continuar o no en París, Emery aseguró a la AFP que no era "el momento" de abordar el tema. "Es el momento de trabajar (...) para preparar bien los partidos contra el Real Madrid. Es el momento de pensar en ahora. Hace falta construir el futuro con el presente". El momento ha llegado.

afp/livefutbol