14.09.2019 15:54 h

Justicia iraní vuelve a abochornar al mundo con sus palabras

Las autoridades judiciales de Irán aseguraron el sábado que una mujer, detenida en 2018 por haber intentado ingresar en un estadio de fútbol y que falleció tras quemarse viva la semana pasada, había "confesado su error" durante un interrogatorio.

El portavoz del poder judicial, Gholamhossein Esmaili, citado por el sitio del ministerio de Justicia Mizan Onlinze, no precisó sin embargo en qué consistió su "error". Desde la Revolución islámica de 1979, las mujeres tienen prohibido en Irán entrar en los estadios de fútbol y de otros deportes porque, según los clérigos iraníes, hay que protegerlas de la atmósfera masculina y de los hombres semidesnudos.

Sahar Jodayari, de 30 años, fue arrestada el año pasado cuando intentaba entrar en un estadio en Teherán disfrazada de hombre para ver a su equipo favorito, el Esteghlal FC.

La mujer, apodada "la chica azul" por los colores de su equipo, se prendió fuego la semana pasada delante de un tribunal cuando le dijeron que iba a ser encarcelada durante seis meses, indicaron varios medios.

Según Gholamhossein Esmaili, la joven "admitió claramente haber cometido un error durante su interrogatorio, lo había aceptado y afirmó lamentarlo". El portavoz no dio más precisiones.

La muerte de Jodayari levantó una ola de indignación en las redes sociales y muchos jugadores conocidos usaron la etiqueta #blue_girl (#chica_azul) para pedir a la FIFA que expulse a Irán de las competiciones internacionales y a los fans que boicoteen sus partidos.