02.10.2019 12:58 h

El tropiezo reaviva otro debate en la portería blanca

Courtois está en el ojo del huracán por su falta de acierto.
Courtois está en el ojo del huracán por su falta de acierto.

Se fue Keylor Navas, pero el debate sigue instalado en la portería del Real Madrid, tras el sufrido empate del miércoles 2-2 contra el modesto Brujas en un partido de Liga de Campeones, en el que el meta Thibaut Courtois fue blanco del enfado de los aficionados blancos.

Dos goles en apenas tres disparos a puerta del conjunto belga fueron suficientes para que arreciaran los pitos y abucheos del público a un portero llegado para ser un muro del Real Madrid, pero que no ha logrado hacer olvidar a su predecesor costarricense. "Courtois toca fondo", escribe este miércoles el diario As, recordando que el portero internacional belga "ha encajado cinco goles en esta Champions en sólo ocho disparos...".

Al triplete encajado en la primera jornada en París frente al PSG se unió el doblete del miércoles marcado por el joven nigeriano Emmanuel Dennis, con dos disparos prácticamente trastabillándose. "Los dos goles que nos metieron son de risa", reconocía un consternado Zinedine Zidane, tras un partido en el que su equipo tiró media parte por falta de intensidad, antes de apelar a la épica en la segunda.

"La realidad es que hicimos un mal primer tiempo, entramos mal en el partido, no controlamos nada", aseguró Zidane, tras una primera mitad en la que uno de los más señalados fue Courtois, que se retiraría al descanso por unas molestias estomacales. "Podemos culpar a Thibaut (Courtois) en la primera parte, pero aquí estamos todos, yo el primero, el primer responsable soy yo", defendió el técnico blanco a su portero, que a juicio del diario Sport "vivió su noche más aciaga".

En la montaña rusa que parece vivir el equipo blanco en este inicio de temporada, líder en la Liga española, pero asomado al abismo en la 'Champions' donde cierra el grupo A, Courtois "no transmite esa impresión de erigirse en el muro inexpugnable que sí ofrecen Oblak en el Atlético y Ter Stegen en el Barcelona", escribe el subdirector de Marca Carlos Carpio en su columna.

Courtois llegó al Real Madrid en el verano boreal de 2018 por 42 millones de euros procedente del Chelsea, tras sus buenas actuaciones con el Atlético de Madrid y el equipo inglés, y brillar en el Mundial de Rusia con su selección, que se colgó el bronce.

Después de una primera temporada discreta de alternancias con Keylor Navas y una constante comparación entre ambos, la salida del costarricense hacia el PSG acabó en principio con el debate y dejó al belga como titular indiscutible bajo los palos, pero sus actuaciones no acaban de convencer.

Poca fortuna bajo los palos

En lo que va de temporada, Courtois ha encajado 11 goles en ocho partidos oficiales, en los cuales sólo ha logrado mantener su portería a cero en tres. Y su actuación el martes no ha contribuido a acrecentar la confianza de los aficionados en el guardameta. "Ayer no fue el responsable del nuevo tropiezo en Champions pero pudo hacer más en los dos goles y estuvo muy lejos de ser el salvador de su equipo, que es lo que se le pide", afirmó Carpio.

Pitado por el Bernabéu, Courtois fue sustituido en el descanso por el francés Alphonse Areola, que hizo el camino inverso de Navas, para ser el sustituto del belga.

Areola, campeón del mundo con Francia en 2018, apenas ha jugado 135 minutos en dos partidos con el Real Madrid, pero el miércoles se sacó una parada salvadora, que evitó un tercer gol del Brujas, lo que le valió los aplausos del Bernabéu, que lo jaleó en más de una ocasión.

"Si la marcha de Keylor pretendía acabar con el debate, Areola ya se ha encargado de recuperarlo porque Courtois tiene un problema y el francés aprieta firme", escribió el diario Marca. Ahora le toca reaccionar a Courtois y a un equipo blanco que se ha quedado sin margen de error en Europa.

afp/livefutbol