15.06.2021 12:29 h

Francia-Alemania, cita entre últimos campeones del mundo

Con Karim Benzema y Kylian Mbappé conformando una sociedad de ensueño en ataque, Francia pone a prueba sus elevadas ambiciones ante Alemania en la puesta de la largo de ambos colosos del fútbol en esta Eurocopa, el martes en Múnich.

En este choque del Grupo F, los campeones del mundo de 2018 acuden a la morada de sus predecesores con la moral por las nubes, la enfermería vacía, pero con la humildad por bandera antes de enfrentarse a un rival con ganas de revancha, incapaz de vencer a su vecino galo desde el cuarto de final del Mundial-2014 (1-0).

"En cada partido, las estadísticas pueden ser invertidas", afirmó con prudencia el seleccionador francés Didier Deschamps sobre la buena racha de su tropa ante Alemania (tres victorias y dos empates).

Los 'Bleus' pueden hoy en día mirar a los ojos a Alemania, después de la semifinal de la Eurocopa-2016 ganada con un doblete de Antoine Griezmann (2-0), un éxito reeditado por los franceses en 2018 en su último duelo contra los Alemanes (2-1) en Liga de Naciones.

Con molestias esta semana en el gemelo, el delantero del FC Barcelona estará en principio apto para conformar un ataque letal con Mbappé y Benzema.

"En ataque ellos son muy fuertes y nosotros debemos estar preparados para tener acciones de uno contra uno", avisó el defensor alemán Antonio Rüdiger. "Dependerá de nosotros, los defensores, creo que eso puede marcar la diferencia (...) No ser siempre amable y tratar de salir adelante con un fútbol bonito. Contra jugadores así, hay que enviar también un mensaje... y pronto".

Preguntado sobre esa amenaza velada, Mebappé respondió el domingo en conferencia de prensa. "Cada uno pelea con sus armas. Nuestras armas son jugar juntos nuestro fútbol. Si sus armas son esas..." "Pero nos gusta jugar este tipo de partidos, son sueños de infancia", afirmó el campeón del mundo del PSG.

Antes de enfrentarse a Hungría y después a Portugal, vigente campeona, los 'Bleus' estarán en tierra hostil en un Allianz Arena con 14.000 espectadores. Un 20% del aforo del estadio, prudencia sanitaria obliga.

Cuatro componentes de los 'Bleus' se sentirán como en casa en Múnich: Benjamin Pavard, Lucas Hernandez, Corentin Tolisso y Kingsley Coman se verán las caras con varios de sus compañeros en el Bayern (Manuel Neuer, Serge Gnabry, Joshua Kimmich y Thomas Müller). "En el club son mis amigos, pero durante el partido serán mis rivales. No habrá regalos, si hay que meter el pie lo meteré", lanzó Pavard.

Antes de este derbi franco-alemán del Bayern, Hernandez abogó por la prudencia, especialmente respecto al regresado Müller, vuelto a llamar por Joachim Löw, el seleccionador alemán que afronta su último torneo antes de dejar el puesto. "Sabemos que es un buen jugador, muy, muy inteligente, nos tocará bloquearlo un poco y hacer un trabajo para que no aparezca demasiado durante el partido", declaró el defensor en una entrevista a la AFP.

Didier Deschamps y Joachim Löw vivirán su octavo Francia-Alemania como adversarios, que será probablemente la última en Múnich entre dos seleccionadores unidos por una longevidad, un palmarés y una amistad forjada la noche de los atentados. "Vivimos juntos aquellos hechos dramáticos (...) Dejamos de ser adversarios. Estuvimos juntos compartiendo nuestra preocupación", confesó Deschamps.

Ambos técnicos, que suelen coincidir en seminarios de la UEFA y de la FIFA, las muestras de sintonía se producen a menudo y con una sinceridad evidente. Otro dato apunta a un choque igualado: desde la implantación de la fase de grupos en 1980, Alemania nunca perdió su primer partido en 10 participaciones en la Eurocopa. Francia, en ocho presencias desde entonces, tampoco.

afp/livefutbol