05.07.2021 11:40 h

Italia-España e Inglaterra-Dinamarca iluminan Wembley

Wembley vivirá tres fechas mágicas con los duelos finales de la Euro.
Wembley vivirá tres fechas mágicas con los duelos finales de la Euro.

Una Italia en pleno renacimiento frente a España en reconquista, e Inglaterra en casa ante una desatada Dinamarca. Las semifinales de la Eurocopa se disputarán el martes y el miércoles en un estadio de Wembley que contará con más de 60.000 espectadores, a pesar de los temores por la pandemia.

"¡Football's coming home!": En las calles de Londres esta semana habrá que habituarse a los elogios a una selección inglesa por parte de una afición que sueña con lograr su primer trofeo europeo. Pero antes de la final del domingo, los Tres Leones tienen que hacer los deberes ante la sorpresa de la competición, Dinamarca.

El equipo nórdico ha sabido transformar en un estímulo positivo el drama que sufrió en su primer partido, cuando su líder Christian Eriksen sufrió una parada cardiaca, en Copenhague ante su público. "Jugamos con Eriksen en el pecho, merecía estar aquí. Luchamos con eso, hacerle sentir orgulloso nos hace felices", resumió el centrocampista Thomas Delaney, goleador en cuartos ante la República Checa (2-1).

Tras ganarse el cariño del planeta fútbol, Dinamarca está a dos pasos de reeditar su epopeya de 1992, cuando el arquero Peter Schmeichel y sus compañeros fueron capaces de ganar el título tras haberse clasificado por la exclusión de último minuto de Yugoslavia, debido a la guerra.

Dinamarca tiene un trofeo mientras que Inglaterra, el inventor del fútbol, perdió en las dos semifinales que disputó, en 1968 y 1996. "Estos últimos años hemos sufrido y hemos tenido noches difíciles, con prestaciones decepcionantes. Pero hoy tenemos mucha fe y los jugadores ven que es posible", aseguró el seleccionador inglés Gareth Southgate.

Momentos complicados han vivido también en los últimos años España e Italia, que se cruzan en una Eurocopa el martes por cuarta ocasión consecutiva. Ausente del Mundial de 2018, la Nazionale vive un renacimiento tanto por juego como por resultados, espectaculares con una racha de 32 partidos sin derrota.

La Roja, tres veces ganadora de la Eurocopa, quiere recuperar su gloria reciente, cuando encadenó los títulos continentales en 2008 y 2012, con el trofeo mundial de 2010 en medio. En 2021, España presenta un equipo menos brillante que la generación de Xavi, Andrés Iniesta e Iker Casillas, pero con capacidad para dar la vuelta a situaciones difíciles, como en octavos ante Croacia (5-3 tras prórroga) y en cuartos frente a Suiza (1-1, 3-1 en penales).

El seleccionador Luis Enrique tiene fe ciega en jugadores jóvenes como el arquero Unai Simón (24 años), que paró dos penales ante Suiza, el central Pau Torres (24) o el atacante Ferran Torres (21).

Italia, campeona de Europa únicamente en 1968, sueña con su segundo trofeo gracias al gran trabajo del seleccionador Roberto Mancini, que ha sabido formar un bloque compacto, dinámico y atractivo. "Hace varios meses que hablamos de este equipo de manera positiva, hay que felicitar a los jugadores por eso, venimos de lejos y vamos a seguir progresando", señaló el técnico tras derrotar en cuartos a una de las grandes favoritas, Bélgica (2-1), en un duelo en el que único aspecto negativo fue la lesión de uno de sus mejores jugadores, Leonardo Spinazzola, fuera de los terrenos varios meses.

Wembley será el espectacular cierre de esta Eurocopa inédita, disputada en 11 estadios de 11 países, con cuatro anfitriones en semifinales de un torneo marcado por la política y las restricciones sanitarias. Tras ser aplazada un año, la Eurocopa ha estado marcada por las críticas debido a la aceptación de público mientras crecían los casos de la variante Delta del covid-19.

En este contexto, más de 60.000 espectadores, la gran mayoría locales debido a las restricciones de viaje a Inglaterra, se citarán en el 'Templo del fútbol', lo que ha sido criticado por políticos europeos como Angela Merkel y Mario Draghi.

afp/livefutbol