El guardameta del Real Valladolid, Diego Mariño, ha comunicado al club su decisión de abandonar la disciplina pucelana y su intención de ir cedido al Levante, acogiéndose de esta manera a la cláusula de su contrato que contemplaba marcharse cedido a un conjunto de primera en caso de que el conjunto vallisoletano descendiera.

El portero de 24 años no se ha entrenado con el resto de sus compañeros en la mañana de hoy con lo que se espera que su marcha sea inmediata, según ha explicado en rueda de prensa el presidente de la entidad, Carlos Suárez.

"No entiendo la decisión de Diego Mariño, a estas alturas. Nosotros negaremos la cesión de Mariño. El plazo para ejecutarla está vencido, finalizaba el 30 de junio", declaró visiblemente afectado por la noticia que ha llegado con la pretemporada ya en marcha. "El problema no es la cláusula, es el plazo de la misma. No estoy de acuerdo en las formas. Trataremos de buscar la mejor solución. No nos esperábamos ésto", añadió el máximo mandatario.

En cualquier caso, el meta natural de Vigo estaría obligado a volver al Real Valladolid la próxima campaña en caso de que el club castellano-leonés consiguiera el ascenso a primera división.

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