La Roma (2º), después del varapalo sufrido ante el Bayern en la Champions (7-1), inicia la reconstrucción ante la Sampdoria (3º), que aspira a igualarlo a puntos (15 frente a 18), el sábado en la octava jornada italiana, en la que el líder Juventus recibe al Palermo (16º).

Cuando parecía que todo iba sobre ruedas para el equipo dirigido por el francés Rudi Garcia, con un balance de seis victorias y una derrota en la Serie A, a un sólo punto del líder Juventus, la tercera jornada de Champions supuso una debacle completamente inesperada y de enormes dimensiones.

Pero los medios de la capital italiana recuerdan estos días la coincidencia con 2007: Aquel año el Manchester United endosó a la Roma un 7-1 en los cuartos de final de la Champions. De regreso al campeonato nacional le tocó jugar con la Sampdoria, a la que batió 4-0, por lo que al menos queda el buen augurio.

Garcia podría alinear un once muy similar al que puso en liza ante la Juventus, con la posible ausencia de Ashley Cole, desastroso el martes ante el holandés Arjen Robben, y la segura baja del griego Kostas Manolas, que cumple su último partido de suspensión. El alemán José Holebas y Davide Astori se presentan como sus sustitutos. Una buena manera de aliviar la decepción europea sería ganar el sábado y dormir como líder de la Serie A, al menos hasta el partido de la Juventus.

El equipo de Massimiliano Allegri viene de perder 1-0 en el campo del Olympiakos, también en la Liga de Campeones, con una actuación espectacular del portero local, el español Roberto. Pero las paradas del arquero ante las ocasiones, sobre todo de su compatriota Álvaro Morata, no esconden una realidad, la pérdida de poderío de la Juventus cuando sale de las fronteras italianas. La buena noticia para la Juventus llegó este viernes, cuando el centrocampista francés Paul Pogba, el hombre llamado a liderar el proyecto, renovó su contrato hasta 2019.

Además el domingo el Milan, cuarto en la clasificación, intentará confirmar las buenas sensaciones en su estadio ante una Fiorentina por debajo de las expectativas (11º). El Inter de Milán (9º), que viene de empatar sin goles ante el Saint-Etienne en la Europa League, viaja a Cesena (15º) en plena tormenta institucional, tras la dimisión de Massimo Moratti como presidente de honor. Nápoles (7º), otro grande que no acaba de tomar el pulso a la temporada y que viene de perder 2-0 ante el Young Boys en la Europa League, recibe al Verona (8º), en un choque de riesgo debido a la gran rivalidad entre los tifosi de ambos clubes.

---> Programa de la octava jornada 

afp