Cristiano Ronaldo estará en la final de la Champions League el próximo 28 de mayo pese a no haber podido completar las últimas sesiones de entrenamiento que el Real Madrid realizó el pasado viernes y sábado. El bíceps femoral del luso no termina de recuperarse al 100% y todo el club espera que llegue en la mejor forma posible al duelo frente al Atlético.

Las molestias que arrastra el delantero portugués en el bíceps femoral han propiciado que baje una marcha en el ritmo de sus sesiones para preparar la gran final de la Liga de Campeones. Zidane sabe que nadie conoce su cuerpo como el propio atacante, y por eso el técnico vio con buenos ojos que bajara la intensidad en los últimos entrenamientos.

Aunque el estado físico del portugués ha encendido las luces de alarma, en principio el jugador podrá estar sin problemas en el evento de Milán del próximo sábado, pero se le ha aconsejado prudencia en los esfuerzos en el resto de sesiones preparatorias, según el diario 'Marca'. Hace dos temporadas, y también contra el Atlético, Cristiano vivió una final de Champions muy tocado por las molestias y tanto el de Madeira como el club quieren evitar a toda costa que la situación se repita.

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