¿Angola? ¿Gabón? ¿Otros países? El tiempo es ahora el principal enemigo para la Copa de África de Naciones (CAN) de 2015, que se disputará del 17 de enero al 8 de febrero en un lugar por decidir, después de que el martes se retirara la sede a Marruecos.

El país norteafricano quería un aplazamiento por temor a la epidemia de Ébola que sufren otros lugares del continente y la Confederación Africana de Fútbol (CAF) optó por retirarle la sede, descalificarle del torneo y buscar un nuevo anfitrión.

Lo que parece seguro es que las fechas entre enero y febrero se mantienen, pero falta saber en qué lugar. Una fuente interna de la CAF, que prefirió mantenerse en el anonimato, indicó a la AFP que tres países podrían estar en liza por ser los anfitriones, entre ellos Angola y Gabón.

Angola, país rico por su producción de petróleo, parece favorito. Sus estadios están preparados porque ya acogió el torneo en 2010, pero fue en una edición marcada por el ataque contra la delegación togolesa por un grupo separatista, el 8 de enero de 2010 en Cabinda, provocando dos muertos.

Gabón, por su parte, coorganizó la CAN en 2012 con Guinea Ecuatorial. Sudáfrica y Ghana, que también sonaron como alternativas, hicieron saber que no están interesados y el tercer país que aspira a la organización podría ser Egipto o Nigeria, pero sus situaciones políticas no parecen ofrecer las mejores garantías.

Otra posibilidad, algo sorprendente, fue lanzada por el diario francés L'Équipe y la radio tunecina Shems FM: la Copa de África de Naciones podría jugarse en Asia, en Catar, que será la sede del Mundial en 2022. Una deslocalización a otro continente que no parece la más positiva en términos de imagen para África. La elección del nuevo país anfitrión debería ser anunciada en "dos o tres dias", afirmó a la cadena de televisión France 24 el presidente de la CAF, Issa Hayatou. 

La fuerza del ébola

Marruecos era hasta el martes la sede de la CAN-2015, pero ante lo que considera "un caso sanitario de fuerza mayor" insistió en aplazar el torneo y no jugarlo en enero y febrero, por temor a la epidemia de Ébola que ha provocado 5.000 muertes recientemente, principalmente en tres países de África Occidental (Guinea, Liberia, Sierra Leona). Ante sus reiteradas peticiones de aplazamiento, la CAF decidió buscar un nuevo escenario.

La instancia continental estimó que el argumento no está justificado, en vísperas además de que Marruecos acoja el Mundial de Clubes de la FIFA (10-20 diciembre). Marruecos es uno de los pocos países que han mantenido las conexiones aéreas sin interrupción con los países directamente afectados por el ébola (Sierra Leona, Guinea, Liberia y Nigeria), a través de la compañía nacional RAM.

Ha acogido además partidos de las eliminatorias de la CAN de Guinea, que no puede jugar en su país como local, también por el Ébola. El primer castigo a Marruecos fue la descalificación automática de su selección de la CAN-2015, pero es previsible que lleguen nuevas sanciones próximamente.

Entre los posibles castigos están la exclusión de los clubes marroquíes de las próximas competiciones continentales o incluso la descalificación de los Leones del Atlas, sobrenombre del equipo nacional, para la CAN-2017 o incluso la CAN-2019. Si la CAF decide ser todavía más dura, podría pedir a la FIFA que excluya a Marruecos de las eliminatorias para el Mundial de Rusia-2018.

La Federación Marroquí de Fútbol también tendría que hacer frente a multas importantes, aunque el ministro de Deportes insiste en que "Marruecos no ha rechazado organizar la CAN" y "no ha faltado a sus compromisos". La organización del Mundial de Clubes no está por contra amenazada y el país continúa con sus preparativos para un torneo en el que participarán el Real Madrid español, el San Lorenzo argentino y el Cruz Azul mexicano, entre otros.

afp