17.01.2017 20:50 h

Guinea-Bissau, olvida su crisis en la CAN2017

Guinea empató con Gab
Guinea empató con Gab

Guinea Bisáu, después de su meritorio empate ante el anfitrión Gabón (1-1) en el primer partido de la Copa de África, sueña con prolongar el efecto sorpresa en su primera participación en el torneo continental, y unir en torno al fútbol a un país con continuas tensiones políticas.

Los "Djurtus", como se conoce a la selección nacional, se enfrentan a Camerún el miércoles en Libreville, y después a Burkina Faso el domingo en Franceville de cara a clasificarse en su grupo A.

El apelativo alude a una especie de zorros del país de pasado luso y de 1,6 millones de habitantes. Un animal a priori más débil que las panteras de Gabón, los 'Leones Indomables' de Camerún o los 'Potros' de Burkina Faso.

"La Copa de África es la mayor oportunidad para sacar a Guinea Bisáu de las tinieblas y para volver a coser el tejido social desgarrado por las querellas políticas", declaró el primer ministro del país, Umaro Sissoco Embalo, en una entrevista reciente con la AFP.

"Es a través del fútbol que podemos reencontrar la unidad nacional", este deporte "nos permitirá silenciar nuestras rencillas políticas", añadió el ministro Embalo, elegido el 18 de noviembre.

Profunda crisis en el país

El país se halla sacudido por las turbulencias políticas desde el despido en agosto de 2015 del Primer Ministro Domingos Simoes Pereira, a manos del presidente José Mario Vaz, ambos pertenecientes al mismo partido.

Estos conflictos son la última muestra de la inestabilidad de esta excolonia portuguesa: desde su independencia en 1974 ha conocido golpes de Estado, exitosos y fracasados, guerras civiles y asesinatos políticos.

El empate ante Gabón suscitó una gran alegría en las calles de la capital Bisáu, después del gran éxito que ya de por sí supuso la clasificación para el torneo. Esto permite "poner bajo los focos a un país que necesita darse a conocer" por algo que no sea la violencia, estima Alpha Djalo, presidente del comité de apoyo a la selección.

Pero llegar lejos en la competición parece un sueño por ahora para la 68ª selección en el ranking FIFA. Ningún jugador de los convocados por el seleccionador Baciro Candé milita en el campeonato del país. "Somos la gran desconocida, y para algunos, el equipo más débil de la llave. Pero no vamos a Gabón para ser figurantes", avisa.

La federación tuvo dificultades para reunir los 600 millones de francos CFA (sobre 914.000 euros) necesarios para ir a Gabón. Una fortuna en un país que no tiene dinero para pagar con regularidad a sus funcionarios.

"Todavía no tenemos los fondos prometidos por el gobierno. Pero eso no nos impedirá trabajar", dijo el seleccionador antes del torneo. "Me voy a comprometer personalmente con los miembros de mi gobierno para encontrar medios para permitir a nuestro país estar representado dignamente" en la CAN, aseguró el Primer Ministro.

Sin embargo se siguen buscando fórmulas alternativas de financiación. La empresa de telecomunicaciones Orange-Bissau firmó con la Federación un acuerdo de patrocinio de dos años. Además, el comité de apoyo puso en venta camisetas y realizó colectas de fondos en las calles. Y responsables federativos acudieron a Portugal y a Francia para solicitar apoyo entre la importante colonia de guineanos en ambos países. Ahora es turno de los futbolistas sobre el césped.

afp/livefutbol