Dos goles del astro de la Albiceleste sirvieron al FC Barcelona para imponerse al modesto Eibar, y a Messi para auparse en solitario al frente de la tabla de goleadores de la Liga española, con 32 dianas, dos más que el luso Cristiano Ronaldo, su único rival en la carrera por conseguir el Trofeo 'Pichichi' que acredita al máximo realizador del campeonato, algo que Messi ha logrado ya en tres ocasiones.

Pero además, de mantener estos guarismos goleadores, el astro argentino se llevaría su cuarta Bota de Oro, que premia al máximo goleador del continente Europeo en un sistema de puntuación ponderada en función del número de goles y de la importancia del campeonato de cada país. En su primer partido en el pequeño estadio de Ipurúa el hoy capitán del Barça inauguró el marcador al transformar un penal que él mismo había provocado con un disparo interceptado con la mano por el defensa vasco Borja Ekiza (31). Messi no titubeó para convertirlo pese a los últimos fallos desde los once metros. Sentenció el choque a los 9 minutos de la segunda mitad con un remate de cabeza en plancha a la salida de un córner que tocó en un defensa antes de rebasar la línea de gol.

Su entrenador Luis Enrique había dicho de él en la conferencia de prensa previa al partido que un jugador de su categoría "es igual dónde lo pongas, no tiene mérito el posicionamiento táctico. Si está bien, incluso de lateral sería el mejor". El partido de Messi refrendó las palabras de su técnico, no sólo por los dos goles, sino por el repertorio desplegado de pases y por un par de jugadas de 'dibujos animados' en las que sorteó a cuantos rivales le salieron al pase, aunque ninguna de las dos tuvo una finalización acertada.

La victoria ante el Eibar asegura al conjunto azulgrana encarar como líder el 'Clásico' ante el Real Madrid en la próxima fecha. Antes regresa la Liga de Campeones (contra el Manchester City), en la que seguirá la disputa con Cristiano Ronaldo por ser el máximo goleador de esta temporada en la competición, y en el registro histórico de la misma.

Neymar da Silva (Brasil): 
El astro de la Canarinha retornó a los terrenos de juego ante el Eibar luego de haber estado ausente por sanción en la goleada del FC Barcelona ante el Rayo Vallecano hace seis días. Ney dispuso del permiso del club para pasar unos días de asueto en su país, donde se relajó e incluso festejó el cumpleaños de su hermana, lo que no impidió que rindiera a buen nivel en su vuelta a la competición, pese a que no materializara en goles su actuación. No consiguió desbordar hasta que el Barça se adelantó en el marcador y el Eibar empezó a dejar más espacios, lo que aprovechó bien el brasileño sacando rédito a su velocidad en balones a la espalda de la defensa. El de hoy era su partido 300 como profesional con las dos únicas camisetas que ha vestido, la del Barça y la del Santos. 

Preguntado sobre esta efeméride, el astro brasileño confesó que para él era un partido "especial", pero que no había pensado en ninguna celebración concreta en caso de marcar. Su sustitución por el español Pedro Rodríguez a 25 minutos del final expiró las opciones que pudiese celebrar un gol y Neymar se retiró a los vestuarios con gestos de contrariedad. Ante el Manchester City quizá pueda celebrar un gol en su partido 301 como profesional.

Sergio Agüero (Argentina): 
La derrota ante el Burnley del Manchester City de los argentinos Sergio Agüero, Pablo Zabaleta, Martín Demichelis y Willy Caballero, puso el título de la Premier League en bandeja para el Chelsea. Si el conjunto de Londres derrota en casa al Southampton abrirá con los 'Citizens' una brecha de 8 unidades, una distancia prácticamente insalvable a falta de 9 fechas, máxime cuando el Chelsea tiene aún un partido pendiente. De esta forma el 'Kun' se complica sus opciones de volver a levantar el trofeo inglés, aunque aún le quedan dos objetivos jugosos como finalizar la competición como máximo realizador (está empatado con 17 goles con el hispano-brasileño Diego Costa), y clasificar a su equipo para cuartos de final de la Liga de Campeones, para lo que deberá vencer por más de un gol en el Camp Nou ante el Barcelona. Para lograrlo deberá mejorar las prestaciones ofrecidas ante el Burnley, donde aparte de provocar una amarilla y demostrar que no ha perdido un ápice de velocidad no dejó ningún aviso intimidante para la retaguardia culé.

Claudio Bravo (Chile): 
El meta de La Roja y del Barça siguió con la tónica dominante esta temporada de solventar con seguridad el poco trabajo al que se le somete y dejar de nuevo su casillero de goles a cero. Su única intervención meritoria fue una atajada en un disparo raso desde fuera del área (56).

Luis Suárez (Uruguay): 
Vivió el primero de los últimos cinco partidos sin ver puerta, pero demostró su buen entendimiento con sus compañeros y su acoplamiento al tipo de fútbol del Barça, combinando y ofreciendo buenos pases durante los 90 minutos.

Javier Mascherano (Argentina): 

Ante lo inminente del duelo de octavos de final de la Liga de Campeones ante el Manchester City, y el hecho de estar apercibido de sanción en caso de recibir una tarjeta amarilla, el compañero de Messi Javier Mascherano presenció el choque íntegro desde el banco.

Carlos Tevez (Argentina): 
La Juventus acaricia su cuarto Scudetto consecutivo luego de derrotar a domicilio al Palermo (1-0), con lo que el cuadro turinés aventaja a la Roma en 14 unidades. Tevez completó los 90 minutos con poco protagonismo más allá de un par de disparos lejanos.

Arturo Vidal (Chile):
Ingresó desde el banco al inicio de la segunda mitad en sustitución del italiano Stefano Sturaro. Con él en el césped la Juve anotó el gol de la victoria, aunque el volante chileno no tuvo aportación ofensiva.

Alexis Sánchez (Chile): 
El Arsenal se consolidó en la tercera plaza luego de derrotar 3-0 al West Ham del ecuatoriano Enner Valencia, que no pudo jugar por lesión. Alexis disputó 65 minutos antes de ser sustituido cuando su equipo vencía 1-0, en los que vio una amarilla por controlar un balón con la mano.

Diego Godín (Uruguay): 
El Atlético de Madrid empató a cero ante el Espanyol de Barcelona y prácticamente dijo adios a sus opciones de revalidar el título de Liga. Godín cuajó un partido serio y no sufrió en defensa pese a que su equipo disputó toda la segunda mitad con un jugador menos por la expulsión del central brasileño Joao Miranda al filo del descanso. En su lugar ingresó el también charrúa José María Giménez, con el que Godín tiene una compenetración absoluta. La dupla de centrales de la Celeste sumó un partido más sin conceder goles en contra.

Felipe Caicedo (Ecuador): 
El delantero del Espanyol fue titular y sacó rédito a su físico poderoso a la hora de proteger el balón o de llevarse las disputas aéreas. En una de ellas salió malparado por un choque con el uruguayo Godín hasta el punto de que el delantero de Guayaquil precisó de asistencias médicas. Dejó su sitio sobre el tapete al uruguayo Christian Stuani a falta de media hora para el final del partido.

afp/livefutbol