Griezmann conoce bien a la Real Sociedad después de haber permanecido en las filas donostiarras desde niño. Tras pasar por las categorías inferiores del club, militó cinco temporadas en la primera plantilla en las que fue unos de los jugadores más queridos por la afición. El pasado mes de julio, el Atlético pagaba la cláusula de 30 millones de euros para hacerse con sus servicios. Para el delantero será un partido especial. "Sentiré emoción seguramente y ganas de jugar con mi nuevo club y mis compañeros. Tengo ganas de disfrutar como cada domingo", reconoció en la rueda de prensa previa al encuentro. 

"Tendrán ganas de ganar, necesitan ganar. Anoeta siempre es un campo complicado para los rivales y contra nosotros van a salir a tope", aseguró. Griezmann trata de adaptarse a los conceptos que impone Simeone. "Hay que acostumbrarse al juego del equipo. Hay que presionar y jugar con intensidad y es lo que intento hacer sin perder mi juego. Coger de cada uno y ayudar a los compañeros. He hablado con el míster y entiendo perfectamente lo que me pide. Estoy intentando hacerlo en cada partido y en cada entrenamiento. Estoy seguro de que llegaré a lo que quiere", finalizó.

Siete años sin ‘rascar’ contra el Atleti

Por su parte, la Real Sociedad vive inmersa en una profunda depresión y en zona de descenso con sólo seis puntos, en la penúltima posición de la tabla. Esta semana fue destituido el técnico, Jagoba Arrasate, y por primeva vez en su historia, el club blanquiazul tiene ahora un preparador interino. Así, el domingo se sentará en el banquillo de Anoeta, Asier Santana, hasta ahora entrenador del filial. Junto a Santana estará Imanol Alguacil.

Además, la estadística no está del lado de los vascos ya que desde hace siete años no logran derrotar en Anoeta a los colchoneros. Al menos, la Real Sociedad ha podido entrenase esta semana con la totalidad de sus efectivos. La primera vez desde que dio comienzo la temporada.

Iván Turmo