La Juventus y su entrenador Massimiliano Allegri se juegan mucho contra la Lazio en las semifinales de la Copa de Italia: irreconocible en la Serie A desde hace dos meses, al equipo de Turín le queda el torneo del KO para salvar una temporada catastrófica.

Tres días después de su derrota en el descuento frente a la Lazio en el Olímpico de Roma (1-0), la Juventus se reencuentra el martes con el equipo capitalino en la ida de las semifinales coperas, aunque en esta ocasión con el público a favor.

Luego de una temporada decepcionante, los tifosi bianconeri están furiosos: su equipo solo ha ganado uno de los últimos nueve partidos del campeonato y su tercer puesto está seriamente amenazado por el Bolonia (a dos puntos).

Al ritmo que mantiene la Juve desde finales de enero (siete puntos de 27 posibles) podría peligrar incluso su clasificación para la próxima Liga de Campeones.

Una persona concentra gran parte de las críticas: Allegri. El entrenador se mantiene exageradamente confiado pese a no encontrar explicación al pobre rendimiento de sus jugadores.

"En este tipo de periodos hay que mantener la calma y la tranquilidad; no sirve de nada lamentarse, sólo hay que trabajar", insiste el técnico toscano, que contra la Lazio alcanzó los 500 partidos en un banquillo en la Serie A.

Muchos observadores consideran que Allegri no cumplirá su contrato, que acaba en junio de 2025.

Su futuro podría quedar sellado en caso de eliminación en el torneo copero, que resta como la última posibilidad de que la Juventus dé una alegría a sus hinchas.

El otro billete para la final se jugará entre la Fiorentina, finalista en 2023, y el Atalanta.

afp/livefutbol