El partido que jugarán este martes Brasil y Alemania por las semifinales del Mundial de 2014 "no es una revancha" de la final del torneo de Corea del Sur y Japón-2002, estimó el defensa germano Jerome Boateng.  Brasil venció a Alemania por 2-0, con dos goles de Ronaldo, en la final del Mundial de Corea del Sur y Japón-2002 el 30 de junio de dicho año en el estadio mundialista de Yokohama (Japón).

"No, no es la revancha del 2002 porque mañana será un partido de semifinales y no una final" como aquella vez, dijo Boateng en conferencia de prensa en el estadio Mineirao de Belo Horizonte, donde se medirán el martes cariocas y germanos por las semifinales del Mundial-2014.

Boateng consideró que Alemania necesitará "concentración absoluta" para imponer su "estilo de juego", y se mostró confiado en que de lograrlo "nos permitirá avanzar a la final del Mundial".

Para ello "debemos jugar como equipo, como lo hemos hecho en los partidos anteriores", agregó el defensa del Bayern Munich. Consideró "motivante" para él y sus compañeros "jugar con un estadio en contra" como ocurrirá en el Mineirao este martes.

Ventajas y desventajas

Señaló asimismo que el hecho de que el defensa Dante, que milita también en el Bayern Munich, juegue para Brasil "es una ventaja y una desventaja para ambas selecciones, porque nosotros lo conocemos a Dante y él nos conoce a nosotros".

"Mañana en el campo será un rival, pero una vez que termine el partido seremos amigos de vuelta", agregó Boateng con una sonrisa. Brasil y Alemania se disputan el pase a la final este martes en el estadio Mineirao a las (20H00 GMT).

La segunda semifinal la disputarán el miércoles a la misma hora Holanda y Argentina en el estadio Arena Corinthians de Sao Paulo. Los ganadores de semifinales jugarán el domingo la final del Mundial en el estadio Maracaná de Rio de Janeiro y los perdedores lo harán un día antes en el estadio Nacional Mané Garrincha de Brasilia el partido por el tercer puesto.

afp