Tras dinamitar los pronósticos en octavos de final, Fluminense y Al Hilal se juegan el viernes en Orlando el primero boleto a las semifinales del Mundial de Clubes y el título de equipo revelación del campeonato.

El duelo entre brasileños y sauditas en el estadio Camping World a las 17H00 locales (21H00 GMT) asegura que habrá un representante no europeo entre los cuatro mejores del torneo intercontinental.

El Mundial de Clubes no ha sido el paseo militar que muchos esperaban para las potencias del Viejo Continente, y en ello Fluminense y Al Hilal han tenido una gran responsabilidad.

En una escalada de sorpresas, el equipo carioca derrotó el lunes 2-0 al Inter de Milán, subcampeón de la Liga de Campeones europea, y el Al Hilal subió después la apuesta al tumbar al Manchester City por 4-3 en una taquicárdica prórroga.

Si Al Hilal recoge los frutos de la monumental inversión del fútbol saudita, los resultados de Fluminense y de otros clubes brasileños en este Mundial son una muy necesaria inyección de orgullo nacional ante la crisis de su selección.

Al mando del arquero Fábio y el incombustible Thiago Silva, de 45 y 40 años, la defensa de Fluminense ha sido una de las más fuertes del campeonato, manteniéndose imbatida en tres de sus cuatro partidos.

En ataque, el técnico Renato Portaluppi explota el espectacular momento del colombiano Jhon Arias, una de las sensaciones del Mundial de Clubes.

En los octavos, el internacional cafetero necesitó menos de tres minutos para quebrar la defensa del Inter por la derecha y servir el primer gol a su socio ofensivo, el veterano atacante argentino Germán Cano.

"Para nosotros no es ninguna sorpresa lo que hemos conseguido, llegamos en un momento fuerte y hemos ido haciendo un Mundial digno de lo que es Fluminense", dijo Arias en una entrevista con la AFP en la que reconoció sentirse "muy incómodo" con su apodo de 'Pelé colombiano'.

"No me gusta mucho", admitió.

"Todos sabemos el ícono mundial que es Pelé, y siento que todos los jugadores tenemos una historia diferente, tenemos nuestra propia historia", dijo el exatacante del Santa Fe, elegido Jugador del Partido en tres de los cuatro encuentros del Flu.

Aunque eludieron un cruce con el poderoso Manchester City, en el cuartel general brasileño anticipan un desafío igualmente complicado ante Al Hilal, que también navega invicto por el torneo.

"Acá no hay favoritismo ni nuestro ni de ellos. Va a ser un partido súper parejo", dijo el zaguero argentino Juan Pablo Freytes a la televisora del Flu. "Esta copa da sorpresas todo el tiempo".

Al Hilal, con su victoria ante el City y su empate inicial contra Real Madrid, ha constatado ante el mundo futbolístico que la liga saudita tiene ya armas para ser competitiva internacionalmente.

Su entrenador, Simone Inzaghi, recién reclutado del Inter de Milán, tiene a su disposición un plantel que causaría envidia en las ligas más importantes, construido a base del talonario casi ilimitado del fondo soberano saudita.

En el arco, el marroquí Bono está siendo otra de las estrellas del campeonato. En defensa se alistan el portugués Joao Cancelo, el senegalés Kalidou Koulibaly y el brasileño Renan Lodi, todos con dilatada hoja de servicios en grandes clubes europeos.

En la medular el portugués Ruben Neves y el serbio Sergej Milinkovic-Savic siguen siendo figuras de jerarquía y en ataque revolotean dos agitadores brasileños, Malcom y Marcos Leonardo.

Formado en el Santos, Marcos Leonardo ha puesto ahora la mira en sus compatriotas después del doblete con el que condenó al City de Pep Guardiola.

afp/livefutbol