16.06.2014 13:36 h

Argelia debuta inspirada en el milagro de 1982

Argelia debuta en el Mundial de fútbol el martes contra Bélgica con el peso de no haber marcado un gol en los últimos 28 años en una fase final pero el recuerdo de su éxito histórico contra Alemania en 1982 como fuente de inspiración.

"En la época éramos un país subdesarrollado que se encontraba al ogro alemán, campeón de Europa. Pensamos que íbamos a perder 5-0 o 6-0, que nos iba a devorar la potencia alemana, que tenía grandes nombres como Rummenigge, Stielike o Hrubesch", señala Noredine Kourichi, protagonista de una de las páginas más bellas del fútbol argelino, que no disputó las eliminatorias de la Copa del Mundo hasta 1970.

Entonces en el Girondins de Burdeos, el poderoso central (1,92 metros), en la actualidad ayudante del seleccionador, fue titular en el once argelino aquel 16 de junio de 1982 en Gijón (norte de España). Argelia ganó 2-1 con goles de Rabah Madjer y Lakhdar Belloumi, pero luego fue eliminada tras el conocido como 'partido de la vergüenza', un presunto amaño entre Austria y Alemania. "Aquel día la calidad técnica hizo la diferencia con la potencia de Alemania. La preparación era similar a la de hoy, un grupo sereno pero poco experimentado", recuerda Kourichi.

Ningún gol y un único punto

Desde entonces Argelia ha disputado otras dos ediciones de la Copa del Mundo, en México-1986 y en Sudáfrica-2010, con un balance mediocre hace cuatro años (ningún gol, un único punto fruto de un empate sin goles ante Inglaterra). Para suceder a Djamel Zidane, último goleador argelino en un Mundial (1-1 ante Irlanda del Norte en 1986, en la fase de grupos), los Zorros del Desierto cuentan, como en 1982, con la baza de la juventud.

Entre sus jugadores más destacados destacan Sofiane Feghouli, de 24 años, nacido en París y criado en Grenoble antes de explotar en el Valencia, o Islam Slimani, que ha firmado una notable temporada con el Sporting Portugal. "Al grupo le falta experiencia, pero tiene un arma importante, la velocidad, y cuando queremos, la despreocupación y el talento, entonces todo está permitido", dice Kourichi, que conoce al grupo de primera mano.

Bélgica es una gran formación

El defensa del Watford (segunda división inglesa) Essaid Belkalem, de 25 años, confía en su equipo: "De acuerdo que Bélgica es una gran formación, pero no coincido con los que dicen que es favorita". "Es suficiente con mirar a España, que es la vigente campeona mundial. Era la favorita y fue goleada por Holanda (5-1). Bélgica es un buen equipo, pero tenemos la voluntad y las competencias para hacerle frente", añadió.

En un grupo a priori accesible, en el que además están Rusia y Corea del Sur, el equipo argelino dirigido por el veterano bosnio Vahid Halilhodzic toma como modelo las pruebas realizadas antes del Mundial. "Han sido satisfactorias", destaca Kourichi sobre una gira en la que ganaron 2-1 a Rumanía.

No hay que centrarse solo en Hazard

Acerca del rival del martes el técnico avisa de que no deben fijarse en un único jugador: "Si nos centramos en Eden Hazard, tenemos el riesgo de llevarnos una mala sorpresa. Conocemos su calidad y sus puntos débiles, pero no hay que concentrarse en él, hay otros, como Lukaku".

Tras la decepción sudafricana, la actuación de Argelia será muy seguida en un país con una larga tradición futbolística. "El primer partido es fundamental, pero sabemos que tenemos confianza y estamos preparados para completar tres hazañas", concluye Kourichi.

afp