Tras más de una hora en la que casi no participó, Eden Hazard despertó en la recta final para ser decisivo en la victoria 1-0 de Bélgica sobre Rusia, que clasifica a octavos del Mundial a los Diablos Rojos, ofreciendo la asistencia del gol a Divock Origi.

En el primer tiempo el peligro del equipo centroeuropeo estuvo en las botas del extremo derecho Dries Mertens. Todas las ocasiones llegaron por su banda, dejando a Hazard aislado en la izquierda, sin prácticamente entrar en juego.

La estrella del Chelsea, faro ofensivo de la selección belga, no lograba encontrar su fútbol asociativo. Cuando intentaba una combinación no se entendía bien con sus compañeros y tampoco estaba brillante en el regate, otro de sus puntos fuertes. Pero la salida de Mertens en el minuto 75, que dejó su puesto a Kevin Mirallas, coincidió con el 'momento Hazard'. El mediapunta logró enchufarse al partido en la recta final y comenzó a llevar peligro a la meta rusa.

Diez minutos buenos

"Estoy en forma, tratando de marcar diferencias, como es habitual, lo he logrado al final del partido, lo que demuestra que estoy fresco. No hemos hecho un buen encuentro, sólo diez últimos minutos buenos", reconoció tras el duelo. Hazard amenazó en el minuto 84 con una bella jugada individual en la que, tras un reverso en el área, disparó fuera, pero se ganó el aplauso de los 73.0000 espectadores que se citaron en el estadio Maracaná de Rio de Janeiro.

El belga por fin había encontrado su mejor versión y la sensación de peligro era continua en el área rusa. En el minuto 88 recibió en la banda izquierda y sorteó a los defensas hasta alcanzar la línea de fondo y ofrecer el pase de la muerte para que Origi, de 19 años, lograra el gol de la victoria, que daba el pase a los Diablos Rojos a los octavos de final del Mundial. Disfrutando del momento, protagonizó otra arrancada para ceder a Mirallas en el tiempo adicional (90+2), pero disparó fuera.

Todavía lejos del nivel de Messi y Ronaldo

En un partido cerrado, un reto para los regateadores como Hazard, el belga pudo aprovechar que en los minutos finales el equipo dirigido por el italiano Fabio Capello dio un paso adelante y se fue a por la victoria. Con más espacio y más cansancio por parte de los defensas, el antiguo líder del Lille logró hacer daño y dejar a los rusos al borde de la eliminación.

"Eden tiene el potencial para convertirse en uno de los cinco mejores jugadores del mundo. Ahora debe jugar, debe soltar el freno de mano", ha insistido en las últimas semanas el seleccionador Marc Wilmots para otorgar confianza a su estrella. "Los cumplidos del seleccionador me gustan, pero no estoy de acuerdo con él. Para formar parte del 'top' mundial, debo marcar más. Lo que hacen Messi y Ronaldo es extraordinario, estoy todavía lejos de ese nivel", recoge un humilde Hazard.

La falta de brillo en Europa

Los detractores del futbolista de 23 años subrayaban antes de este Mundial el poco peso específico del jugador en las grandes citas. En la Liga de Campeones no ha brillado todavía como sí lo hizo en la liga francesa, en la que condujo al Lille al título, o en la liga inglesa con el Chelsea.

En el regreso de Bélgica al Mundial despues de 12 años sin lograr clasificarse, Hazard está respondiendo a las expectativas. Dos pases decisivos han servido para lograr dos victorias y situar a su equipo, uno de los aspirantes a ser la revelación del torneo, en los octavos de final. Parece que el pequeño Hazard (1,70 metros) sigue creciendo.

afp