Ausente en Turquía-2013, Argentina regresa al Mundial Sub-20 como vigente campeón sudamericano y la ilusión de levantar por séptima vez el título planetario en Nueva Zelanda-2015, lo que le permitiría afianzar su hegemonía en la categoría, desde la que saltaron a la fama astros de la talla de Diego Maradona y Leo Messi.

Ganador en 1979, año de su estreno absoluto en la división, en 1995, 1997, 2001, 2005 y 2007, la selección albiceleste viajó a Nueva Zelanda con esperanzas renovadas tras ganar con contundencia el cetro sudamericano tras doce años de sequía, basándose en un esquema de juego con mucho despliegue físico, orden y equilibrio, y la explosión arriba de Ángel Correa (Atlético Madrid) y Gio Simeone, máximo artillero en el clasificatorio continental (9 tantos). "Me gustaría pelear por la Bota de Oro en la Copa del Mundo", se anima el "Cholito', ya con experiencia de varios partidos en la primera división de River Plate.

El equipo de Humberto Grondona, de 57 años, hijo del fallecido expresidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Don Julio, es cabeza de serie del grupo B, que componen además Panamá, Ghana y Austria, por lo que a priori no debería tener problemas en sacar boleto a octavos de final.

"Es lindo ir como candidato, pero no hay que confiarse", advierte 'Humbertito' en la prensa de su país. "Con Austria y con Panamá jugamos en el Sub 17 y con los dos nos fue bien. Y ahora nosotros estamos mucho mejor. Tenemos muchas variantes ofensivas. A los africanos los estoy estudiando", comentó Humberto Grondona sobre sus a sus adversarios de primera fase.

Hacer honor a la historia

Grondona, que amenazó con dejar el cargo tras la consagración en tierra uruguaya debido a la sostenidas críticas por sus planteos históricamente poco audaces, mantuvo el trabajo con el grupo que fue semifinalista en el Mundial Sub-17 de 2013, en el que se destacan la seguridad del portero Augusto Batalla, observado por el Real Madrid, la elegancia del experimentado defensor Emanuel Mammana, la conducción del zurdito Tomás Martínez y los goles de Gio Simeone, hijo del actual entrenador colchonero 'Cholo' Simeone.

Sin embargo, su principal carta de triunfo es el atacante Ángel Correa, dueño de unos regates endiablados que desacomodan a cualquier defensa, como quedó demostrado en Uruguay-2015, torneo que le sirvió para volver a los primeros planos tras meses de convalecencia, en el marco de una recuperación por una afección cardíaca que le detectaron en Madrid.

Estos pibes argentinos además tendrán que hacer honor a la historia e intentar imitar a varias generaciones que les han regalado fútbol de alto vuelo a los hinchas albicelestes. Para eso deben recordar que Argentina fue campeón en 1979 con la dupla Maradona-Ramón Díaz, a partir de 1995 con las generaciones de José Pekerman en las que brillaron Juan Román Riquelme y Pablo Aimar (1997), Javier Saviola (2001), y posteriormente Leo Messi (2005) y Sergio Agüero (2005 y 2007), entre otros.

afp/livefutbol