13.06.2016 11:37 h

Ingleses acusan a rusos y policía de violencia

La violencia en las calles de Marsella dejó 35 heridos el sábado. (Foto: Getty)
La violencia en las calles de Marsella dejó 35 heridos el sábado. (Foto: Getty)

Los hinchas ingleses y la prensa británica acusaron este lunes a los rusos de haber planeado los enfrentamientos de Marsella, y a la policía francesa de haber gestionado mal la situación.

Las críticas podrían arreciar, porque la fiscalía francesa admitió este lunes que la policía no consiguió detener a ningún ruso y que éstos estaban "extremadamente preparados", mientras que seis británicos serán juzgados este lunes por los episodios de violencia.

El responsable de la unidad policial británica especializada en fútbol dijo que los rusos llevaban protectores bucales, guantes de combate y cuchillos. "Una pequeña minoría de hinchas ingleses estaban en Marsella para causar problemas", explicó Mark Roberts al diario británico The Guardian. Pero los violentos rusos eran "mucho más numerosos", añadió. "Pensamos que eran unos 300".

"Nuestros 'spotters' [fisionomistas en el argot del fútbol] en Marsella vieron cómo se ponían protectores bucales, guantes de combate y pañuelos antes de atacar a los hinchas ingleses en el puerto", afirmó Roberts. "Sabemos que algunos tenían cuchillos porque un seguidor inglés fue apuñalado. Llevaban una especie de uniforme -todos llevaban camisetas y vestimentas negras- y muchos llevaban riñoneras, quizás para disimular armas", añadió.

La violencia en las calles de Marsella dejó 35 heridos el sábado coincidiendo con el partido de la Eurocopa-2016 Inglaterra-Rusia, tres de ellos en estado grave. El hincha inglés que el sábado se debatía entre la vida y la muerte se encontraba "en estado estable", indicó el domingo la Prefectura de París a la AFP.

Roberts advirtió contra posibles enfrentamientos en el norte de Francia esta semana, donde se deben jugar los partidos Rusia-Eslovaquia, el miércoles en Lille, e Inglaterra-Gales, al día siguiente en Lens.

Descalificación del torneo

La UEFA amenazó a Inglaterra y Rusia con la "descalificación" del torneo "en caso de nuevas violencias" de sus seguidores. Geoff Pearson, experto en 'hooliganismo' de la Universidad de Mánchester, dijo a la AFP que la policía francesa "no gestionó bien a la hinchada inglesa, no se comunicaron con ellos, y no supieron manejar tampoco a este movimiento de ultras rusos. Se enfrentaban a los hinchas ingleses [la policía] cuando en realidad deberían haberlos protegido".

Según Pearson, la policía lanzó repetidamente gases lacrimógenos a los hinchas ingleses sin haber sido ni siquiera provocados. En contraste con la estrategia de la policía británica de tener siempre bien separadas a las aficiones rivales, antes, durante y después del partido, parecía que los agentes franceses "esperaban a que todo estallara para empezar a ocuparse", lamentó en The Times Graham Wettone, un agente retirado de Scotland Yard especialista en fútbol.

Además, 'The Times' dijo que uno de los heridos graves británicos lo fue, "aparentemente", por el impacto en la cabeza de un proyectil de gases lacrimógenos lanzado horizontalmente. "¡La peor experiencia NUNCA sufrida en un partido fuera! ¡Rociados con gases lacrimógenos sin ningún motivo, enjaulados y tratados como animales!", denunció en Twitter Rebekah Vardy, la esposa del atacante inglés Jamie Vardy, que se vio sorprendida por los incidentes.

Si las autoridades británicas llevan años de esfuerzos por controlar a sus aficionados violentos, Pearson no vio el mismo celo de las rusas. "No puedo imaginarme que las autoridades rusas no tuvieran información sobre este grupo de aficionados, que no estuvieran al corriente de sus intenciones, pudieron impedir que gente considerada de alto riesgo abandonara el territorio".

Los mejores 'hooligans' del fútbol

Vladimir, uno de los rusos que participó en los disturbios y que habló a la AFP ya en Rusia, a condición de que no se publicara su apellido, admitió que fueron a Marsella movidos por el reto de demostrar que son más violentos que los ingleses. "Los ingleses siempre afirman que son los mejores 'hooligans' del fútbol. Fuimos a demostrarles que son unas nenas", explicó.

Uno de los momentos más peligrosos de los enfrentamientos se produjo en el estadio, cuando los hinchas rusos cruzaron el precario cordón humano -formado por personal de una empresa de seguridad- que les separaba de los ingleses para agredirles, y éstos huyeron en estampida hacia el lateral de la tribuna.

La escena trajo a la memoria la tragedia del estadio belga de Heysel en 1989, que dejó 39 muertos en una final de Copa de Europa entre el equipo inglés del Liverpool y el italiano de la Juventus. "Había hombres, mujeres y niños tirándose contra las barreras y las redes para escapar de los rusos", narró Paul Robinson, de 48 años, a The Times.

afp/livefutbol