El Sevilla, vigente campeón del torneo, buscará ante el Dnipro en Varsovia levantar su cuarto trofeo de la Europa League, lo que le convertiría en el equipo con más títulos en la segunda competición europea. Los de Emery cerraron el pasado fin de semana la mejor Liga de su historia, al alcanzar 76 puntos.

Para el equipo ucraniano sería su primer título continental (nunca ha disputado una final europea) y para Ucrania una de las pocas cosas a celebrar en los últimos tiempos en un país devastado por el conflicto armado entre fuerzas gubernamentales de Kiev y rebeldes prorrusos en el este que ha provocado ya varios miles de muertos. Por primera vez, además, el prestigio de levantar un trofeo europeo vendrá acompañado por un boleto para disputar la próxima edición de la Liga de Campeones. Un aliciente más para un Sevilla que se presenta como favorito.

El equipo que entrena Unai Emery acaba de cerrar el pasado fin de semana la mejor Liga de su historia, al alcanzar 76 puntos, aunque esa puntuación no le haya dado más que para finalizar quinto, por detrás de Barcelona, Real Madrid, Atlético de Madrid y Valencia. El equipo andaluz ha cuajado también una gran temporada en Europa, con una sola derrota (2-0 ante el Feyenoord en la fase de grupos) y exhibiciones de fútbol en los dos partidos de semifinales ante la Fiorentina por ejemplo, y llega a Varsovia a defender el título alcanzado hace un año en Turín cuando derrotó en los penales (4-2) al Benfica después de acabar el partido con el 0-0 inicial.

Equipo vendedor

Como ha sido habitual en los últimos años y pese a los éxitos el Sevilla se vio obligado a vender a algunas de las piezas claves en la conquista del tercer título de la Europa League. Así, del equipo que ganó la final en los penales al Benfica hace un año al once que salte al Estadio Nacional de Varsovia habrá varios cambios, siendo el más llamativo el del croata Ivan Rakitic, que marchó al Barcelona, por el argentino Éver Banega. El rosarino se ha convertido en el cerebro del equipo de Emery, que suele darle una gran libertad, para lo que coloca al polaco Grzegorz Krychowiak y al camerunés Stéphane Mbia para hacer le trabajo 'sucio'.

La delantera podría ser la misma que la que jugó hace un año, con Vitolo y José Antonio Reyes en las bandas y el colombiano Carlos Bacca, máximo goleador del equipo con 20 tantos en liga y cinco en Europa, como hombre más adelantado. Las molestias físicas que han afectado a Vitolo en las últimas semanas podría decantar a Emery a poner a Vicente Iborra, con lo que también reforzaría el centro del campo y ganaría poder en el juego aéreo.

Donde más cambios ha sufrido el Sevilla es en la línea defensiva. Las reiteradas lesiones del portero portugués Beto y su mala eliminatoria ante el Zenit San Petersburgo en cuartos, han hecho que el joven Sergio Rico, que comenzó la temporada en el filial, se haya hecho dueño del arco sevillista. Aleix Vidal, una de las revelaciones de la temporada, y el francés Benoit Tremoulinas, que llegó para suplir la marcha de Alberto Moreno al Liverpool, son los carrileros, mientras que su compatriota Timotheé Kolodziejczak y el portugués Daniel Carriço han suplido con garantías la marcha del argentino Federico Fazio al Liverpool y la grave lesión de Nico Pareja.

La sorpresa

El Dnipro, por su parte, intentará dar la sorpresa (como ya hizo en todas las eliminatorias anteriores ante equipos de más renombre como Olympiacos, Ajax, Brujas y Nápoles) y lograr un título europeo para un club cuyos únicos trofeos hasta ahora remontan a la época soviética (dos ligas en 1983 y 1988 y una copa en 1989). El técnico Myron Markevich ha logrado hacer un equipo rocoso, muy compacto, en el que todos los jugadores defiendes y que buscará sorprender al Sevilla al contragolpe.

El equipo ucraniano está en forma como lo demostró contra el Nápoles y también en el campeonato de su país. El pasado fin de semana, pese a jugar con muchos suplentes pensando en Varsovia, el equipo de Dnipropetrovsk derrotó al Shakhtar por 3-2 y se mantiene en la lucha por el campeonato con el equipo de Donetsk, del que le separan dos puntos. El segundo puesto (el primero parece inalcanzable ya que el Dynamo de Kiev le saca 9 puntos con un partido menos) le permitiría disputar la previa de la próxima Champions y acabaría con la tiranía ejercida por los dos gigantes del fútbol ucraniano desde la independencia del país.

El arquero Denys Boyko con sus paradas y el delantero internacional Yevhen Seleznyov, autor de los dos goles en la eliminatoria contra el Nápoles (1-1 y 1-0) fueron los artífices del histórico pase a la final, aunque en el equipo de Markevich también destacan los defensas brasileños Douglas y Leo Matos y el trabajo en el centro del campo del internacional y capitán del equipo Ruslan Rotan. El Dnipro espera, además, mantener la racha del fútbol ucraniano, cuyos clubes nunca han perdido una final europea (el Dynamo Kiev ganó la Recopa en 1975 y 1986 y el Shakhtar la Copa de la UEFA en 2009)... aunque el Sevilla tampoco ha perdido ninguna de las finales de la Europa League que ha disputado (2006, 2007 y 2014).

- Posibles alineaciones:

Dnipro: Boyko - Fedetskiy, Douglas, Cheberyachko, Matos - Kankava (o Bezus), Fedorchuk - Matheus, Rotan, Konoplyanka (o Gama) - Kalinic (o Selezhyov). DT: Myron Markevich

Sevilla: Rico - Vidal, Carriço, Kolodziejczak, Tremoulinas - Krychowiak, Mbia, Banega - Vitolo (o Iborra), Bacca, Reyes. DT: Unai Emery.

Árbitro: Martin Atkinson (ENG)

afp/livefutbol